No sé si es el calentamiento global o qué, pero estos últimos días aquí el calor ha sido avallasante. Y estoy hablando en serio, pues yo soy una persona "friolenta" y me muero del calor. En vísperas a la primavera el calor resulta abrumador, tanto, que no me imagino como estaré en el verano.
Hablando del verano, me estoy prácticamente, muriendo de ganas de que lleguen las benditas vacaciones. ¡Juro que no puedo más con el colegio!
Cambiando de tema, hoy Camila me preguntó si voy a ir al cumpleaños de quince de "Ayén", una chica que sinceramente, no me va ni me viene. Le dije que no sabía, pero la verdad es que lo sé. No iré ni loca.
Creo que mencioné alguna vez que detesto las fiestas y si no lo hice lo digo ahora: Detesto las fiestas. Y no soy masoquista así que a sufrir no voy a ningún lugar... bueno a menos que mis padres consigan obligarme (como lo hacen todos los veranos para que me vaya a Mar del Plata con mi abuela y mi hermana). No creo que tengan derecho de obligarme, pero la verdad es que yo no tengo edad legal para decidir por mí misma.
Volviendo a lo de la fiesta, no voy a ir. Ni pienso.
También tengo que idear la forma para no ir a la de Camila tampoco. Porque no quiero hacerlo.
Vale, solo era eso lo que tenía ganas de descargar.
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